jueves, 18 de diciembre de 2014

Fallo de "Cuarto Certamen de Poesía Ipso Facto 2014"

Desde sus inicios en 2011, los certámenes Ipso Facto se encargaron de promover la  poesía joven a nivel regional. Con ese propósito, como Editorial EquiZZero, nos enorgullece dar a conocer a los ganadores del "Cuarto Certamen de Poesía Ipso Facto 2014". 


Los miembros del Jurado calificador del IV Certamen Literario Ipso Facto han decidido unánimemente conceder el primer premio de forma compartida a las obras: Levedad de voz de la poeta Diana Carolina Castro y Letargo de caricias del poeta José Gabriel Quintanilla. Por considerar que destacan del resto de finalistas.

"En Levedad de voz está presente un lenguaje poético intenso y destaca por la fuerza de sus imágenes."

"Letargo de caricias sobresale por su unidad temática y la habilidad del autor por crear empatía con y para el lector."


Por tal motivo, Editorial EquiZZero se compromete en publicar ambas obras en un plazo no mayor a nueve meses. Cuyo tiraje será de 200 ejemplares para cada obra, del cual el autor recibirá el 20%.



"Quizá también piensen que las ramas en mis dedos
fueron fruto de la codicia y del tiempo vacío..."

Diana Carolina Castro



"el mundo cabe en el ladrar de un perro."

José Gabriel Quintanilla

lunes, 1 de diciembre de 2014

"Sólo una cosa no hay..." (Presentación de libros y lectura de fin de año)


Estaremos presentando los libros: "Retazos de asfalto en penumbras" (Manuel González), "Solsticio de posguerra" (José Luis Escamilla) y "Las florecidas arboledas del mar" (Luis Alvarenga). La cita es en el Teatro Nacional de San Salvador, 4 de diciembre, 2:00 p.m. 



jueves, 6 de noviembre de 2014

Finalistas del Cuarto Certamen de Poesía "Ipso Facto 2014"

Las bases del certamen estipulan un número de 10 finalistas, sin embargo, las personas que forman parte de este filtro consideraron por UNANIMIDAD que los acá publicados son los que cumplen con los requisitos de "calidad literaria" para ser tomados a consideración como posibles ganadores.

(click a la imagen para agrandar)

sábado, 30 de agosto de 2014

Bases del "Cuarto Certamen de Poesía Ipso Facto 2014"



Podrán participar aquellas personas cuyas edades oscilen entre 18 y 45 años, que hayan nacido y residan actualmente en Guatemala, Honduras, El Salvador,  Nicaragua y Costa Rica, y no hayan ganado este certamen con anterioridad

Los trabajos deben ser inéditos  y no estar participando en otro certamen; escritos en español; formato WORD, tamaño carta, letra Times New Roman base 12 e interlineado de 1.5. La extensión de los trabajos no debe de ser menor de 35 páginas ni mayor de 70 y debe incluir un sólo  poema por página. La temática es libre. El género que participa es POESÍA.

Los interesados deberán enviar una sola OBRA a la dirección: editorialequizzero@hotmail.com, firmadas bajo seudónimo. En otro  archivo se deben adjuntar los siguientes datos: lugar y fecha de  nacimiento, dirección, teléfono y correo electrónico y copia de documento de identidad.

La obra seleccionada será publicada por Editorial EquiZZero en un lapso no mayor  de 9 meses. El tiraje total será de 300 ejemplares de los cuales el 20% corresponde al ganador.

La recepción de obras inicia a partir de la publicación de las siguientes bases y finaliza el sábado 18 de octubre del presente año a las 16 horas. El sábado 1 de noviembre se dará a conocer una lista de 10 finalistas sobre los cuales se deliberará el nombre del ganador.

El fallo será inapelable y se dará  a conocer día 16 de diciembre de 2014 a través de: equizzero.blogspot.com y facebook.com/EquiZZero.


miércoles, 20 de agosto de 2014

Lanzamiento de las bases del Cuarto Certamen de Poesía Ipso Facto 2014

La cita es mañana jueves 21 de agosto en los Tacos de Paco a las 7:00 pm, estaremos presentando los libros: "Hierro y abril" de Alberto Quiñónez y "Tempestadnayade" de Ernesto Bautista, ambos libros fueron seleccionados por el jurado, como menciones honoríficas, para ser publicados por Editorial EquiZZero.




sábado, 26 de julio de 2014

Lanzamiento de bases del Certamen de Poesía Ipso Facto 2014




El certamen de poesía Ipso facto nació en el 2011 con el propósito de promover la literatura escrita por mujeres. El tiempo fue develándonos otros caminos, otras latitudes, de manera que este certamen fue adquiriendo nuevas  dimensiones. La cuestión etaria es algo que le compete más la estadística y al marketing, no así a la poesía. Sin embargo, cuando decidimos fundar Editorial EquiZZero nuestro propósito era (y sigue siendo) el mismo espíritu que guía este concurso: promover la poesía escrita por jóvenes. Desde entonces, 6 escritores han pasado a formar parte de nuestra familia: Katheryn Rivera Mundo y Elena Salamanca en 2011, Manuel Membreño (Nicaragua) y Abigail Reyes en 2012, y Ernesto Bautista y Alberto Quiñónez en 2013. En nuestros deseos está que la familia se amplíe, que la poesía se ensanche. Por eso, este 21 de agosto estaremos lanzando las bases y presentaremos los libros ganadores. "Ipso facto 2014" está abierto a aquellos cuyas edades oscilen entre 18 y 35 años, y residen en Guatemala, Honduras, El Salvador, Nigaragua y Costa Rica. Pronto daremos más información al respecto. 


Compartimos con ustedes unos links donde podrán encontrar una selección de poemas de todos los ganadores. 

Elena Salamanca: http://equizzero.blogspot.com/2012/04/landsmoder-elena-salamanca-editorial.html

Katheryn Rivera: http://equizzero.blogspot.com/2012/05/muneca-rota-katheryn-rivera-mundo.html

Abigail Reyes: http://equizzero.blogspot.com/2012/10/sin-coro-sara-abigail-reyes-ipso-facto.html

Manuel Membreño: http://equizzero.blogspot.com/2012/10/ipso-facto-2012-poemas-sin-esquina.html

Ernesto Bautista: http://equizzero.blogspot.com/2014/07/tempestadnayade-ernesto-bautista.html

Alberto Quiñónez: http://equizzero.blogspot.com/2014/06/hierro-y-abril-alberto-quinonez.html



sábado, 5 de julio de 2014

Tempestadnayade, Ernesto Bautista, Editorial EquiZZero, 2014.





Experimentación,  ruptura,  crisis onírica, concreción de lo fatídico son términos que podrían definir la obra de Ernesto Bautista que, como un caleidoscopio, anuncia una complejidad de imágenes y formas que conmueven pero al mismo tiempo asombran, no solo por su sencillez sino por la brutalidad que cada texto adquiere como unidad indisoluble de un todo.


Con un leguaje frío y áspero y otras veces sentimental y nostálgico Tempestadnayade (uno de los libros seleccionados en el Tercer Certamen de Poesía Ipso Facto 2013) constituye una de esas peculiaridades que el tiempo devela muy raras veces. Con él, por extraño que parezca, Bautista está más cerca del barroco que de las vanguardias. Borges lo define mejor: Es curiosa la suerte del escritor. Al principio es barroco, vanidosamente barroco…

Aquí está Ernesto, aquí está Tempestadnayade.


Omar A. Chávez
Editorial EquiZZero





Selección poética





Pirómanos eléctricos en la avenida


Esta vez el calor de tus llamas no alcanzó a tocarme porque yo tenía la boca cocida con raíces.
                   
Y te movías  como un  fantasma  epiléptico, te  movías  como un cable herido por la tormenta.

Escapé  de  la  punta  de luz  del  látigo que daba sus últimos gritos, como un dios al que se niega porque no existe. Esta vez el calor de tu escarcha me rozó las mejillas y me quemó los ojos, y no me lo bebí, porque te habías extinto ya, y aquellas raíces me cerraban los labios.





La fuerza de la costumbre


Así como tú me viste cosiéndome los huesos con bisturís, plumas, lonas y papel.

Así como tú te sentabas  a mirar mis saltos desde el techo, y todas las veces que me quebré las piernas y sangré por las caídas.

Así como veías que, al igual que Ícaro, me abalancé desde un peñasco hacia las rocas del mar y me estrellé contra las piedras partiéndome la cabeza.

Así, cosido con rabia, armado de huesos atados a lonas y plumas.

Tú vendrás conmigo.

Esta vez saltaremos juntos. Y tú bailarás al viento y me dirás que tan cierto es eso de que eres mortal.





El incendio


Los árboles corrían despavoridos tratando de sortear las llamas.

El fuego les quemaba las hojas secas, y las verdes también. 
Cuando el fuego es grande nada se salva.

Los árboles se trepaban por las laderas y rayaban las piedras con sus ramas, pero todo era inútil. El bosque se incendiaba y los animales que habían matado, las personas que habían aplastado se quemaban junto a ellos.

Y el espectáculo de las llamas era suficiente para que las aves y los peces musitaran oraciones de misericordia para ellos, y para las enredaderas, que tejían sus redes al cielo, como un fénix que se hunde en sus últimas cenizas.
Solo que ellos ya no retornarían.


El último cedro tardó en quemarse, abrazó una de las masas aformes y sanguinolentas que habían en el suelo. La cubrió con lo que quedaba de sus ramas, como si los restos viscosos le profirieran perdones y lo redimieran.

Luego,  se  sentó  al borde  de un  arrollo seco y se consumió hasta extinguirse.





Los mosaicos tintos del silencio


A veces salto por la ventana
como las águilas se asoman a los peñascos
con los brazos extendidos y los ojos cerrados
y beso en los pétalos del viento las gotas rojas de mi regreso

Y te recuerdo abrazando a los leones a mi lado
entrecerrando los ojos y los labios
bebiéndote mi voz y desangrando mis manos
exiliándome a la lluvia
tras las paredes de alambre y los ojos sonrojados

En esa burla que tu placer suele cantar
es ese el grito de escape de tus deseos
de tu muerte y de tu vida

Da igual

Ojala hubieras sido tú la de las manos en mi espalda
ojala hubieran sido las capas del cielo tu ropa
y la lluvia tus dedos

Estoy regresando al suelo
cuando despierte de tu voz
la volveré a oír mañana.

y entonces te mataré.





La fotografía


Cuando quemé su fotografía sentí que algo en mí moría con aquel papel.

Años antes, simplemente la encontré en mi puerta, triste. Cuando me vio se echó a llorar, desconsoladamente, sobre mis brazos.

Luego se evaporó.

Nunca entendí qué la había llevado hasta ahí,  pero cada vez que miraba esa fotografía, ella regresaba a mi puerta a repetir el mismo ciclo, y siempre se volvía humo entre mis manos.

No sé si había muerto desde que yo me marché, o si eran pesadillas que no encajaban en los colchones y me perseguían con vida propia.

Si eran sus sueños o los míos,
pero ella aparecía cada vez.

Un día decidí quemar esa fotografía.

Fue una noche de tormenta. Esa vez el viento llevaba gritos en sus entrañas.
Voces que pronunciaban mi nombre.
El polvo que arrastraba llevaba la forma de sus manos.

Tomé el encendedor, y éste seducía al papel. Su imagen se empezó a volver cenizas con aquel fuego.

Por la ventana la pude ver.
Pude ver su cuerpo  bajo la lluvia,  y su mirada buscándome en el cristal empañado.

Su cuerpo  envuelto  en  llamas  se consumía por última vez.Y algo de mí moría con ella.

Nuestra historia moría con aquella foto.

Y la tormenta cesó.

Su cuerpo desmoronándose se consumió en el viento y la lluvia.

Miré entonces los restos de la fotografía consumiéndose.
Hasta ese momento comprendí todo.
Su dolor atrapado en aquel papel.
Su recuerdo se había convertido en una criatura, y yo la había matado.

Fue hasta entonces que al fin lo comprendí. Por primera vez lloré por ella.








Ernesto Bautista


Santa Ana, El Salvador. 1987.

Publicaciones: Silencio: Puertas Dormidas (Premio Amilcar Colocho. Metáfora 2007), La Marcha de los Ausentes (Premio Gallo Tapado. Contracorriente Editores 2010). Antología Una Madrugada del Siglo XXI por Vladimir Amaya  y 4M3R1C4 Novisima poesia latinoamericana por Hector Hernandez Montecinos. Residencias artísticas con RAPP (Residencia Artistica para Poetas Performaticos), Granada Nicaragua 2009. Finalista en la Beca de Creación Poética Antonio Machado, Soria, España (2012) y en Beijing, China a traves  del International Network of Literature and Art Committee (INLAC) y el Shangyuan Art Scene (2014). Ha sido traducido al francés, inglés y mandarín.


sábado, 14 de junio de 2014

Solsticio de posguerra, José Luis Escamilla, Editorial EquiZZero, 2014.






Solsticio de posguerra nos invita a marcar la llegada de una nueva estación, un nuevo momento en nuestra historia. Este solsticio se celebra con un ritual, es un concierto a una voz que ofrenda el poeta salvadoreño José Luis Escamilla. Es un poemario con intertextualidades a veces marcadas por el eco de otros versos, a veces por un dicho popular, otras, por su incursión en el discurso académico y otras más por su conversación con otros personajes y autores en la historia nacional. Así, se mueve por diferentes momentos en la producción poética de nuestro país, oscila entre diversos espacios del quehacer cultural, entra y sale del espacio del saber institucional y aborda el espacio del saber popular. 



                                                                                                   Beatriz Cortez
                                                                                  Los Ángeles, California.
                                                                                                         Mayo, 2014.


Selección poética



Designio


I


Y entonces coleccioné la vida
corté una flor silvestre
y la sembré en una esquina del pavimento,
ahí apareció Dios.

Horas más tarde
recogí vestigios de concreto
y lo lancé al corazón del cielo,
ahí estaba el hombre.

Al anochecer tejí alas diminutas
volé como partícula de luz en el viento
Dios y hombre llegaron hasta aquí
y ahí está la imaginación.

  


II


Al final
en el eterno vacío de cristal
vertí instantes crepusculares
que descifré entre cáncer y capricornio.

Brizna amarilla ilumina mis horas
tempestades furibundas soplan del Norte
el polo ya no es magnético
oro y plomo han sucumbido
principia otro tiempo.

Salitre de piel milenaria se anuncia en el Sur
mieles de hojas prohibidas lavan el alma
cocaleros dignifican la tierra en el cielo
y las diminutas tintas clorofílicas
pululan como espermas finiseculares
como anuncio de un perpetuo solsticio
que inicia hoy.




Destello crepuscular


He vuelto al encuentro de las aves
minúscula palabra gritada al viento
destello crepuscular ahogado en las horas.

He vuelto al encuentro del ruido asesino
He vuelto al encuentro del insomne siniestro
que lee los versos del crápula.

Así transcurrieron los años
Todo ha terminado
Sólo queda el canto del viento que hiere
al especialista en el pronóstico del tiempo.




Entelequia


La mentira del presente
es la verdad histórica.




Silce V


Desnuda
aquí cerca de mis manos
sin horas laborales
te necesito.

Tu cadencia infranqueable
bisturí perfecto que rompe el viento
explota en el aire el perfume nocturno de tus senos
delirante llamado del suspenso.

El insomnio asalta el remanso vegetal
de arcoíris atrapado en mis manos del mal
y llegas sin tregua al escalofrío preciso
donde el amor encuentra el paraíso.

Despertamos con el rocío de los labios
mojados
pieles invadidas como tempestad
que solo vos conocés.
Besos desnudos
decantan los abismos de la conquista
que gritan en sigilo indómito
la fuerza de los cuerpos
atrapados en este eterno segundo
que en algunos días serán veinte años.




Camarada anónimo


A Jorge Arias Gómez


Son tus horas
un siglo estrujado en el invierno,
mil ideas gaseosas iluminan el cosmos
y tu trabajo voluntario
pulula en los pasillos de este santuario.

Querido Jorge
te dijo el poeta
mientras el frío dibujaba esperanzas en el silencio de Praga.
Cuánto diletante
desea aquel manifiesto de ternura
que años después se convirtió en amargura.

Este episodio es el desván del siglo
con palabras últimas
señales de epílogos
novelas irrepetibles
que testimoniaste con tu humildad de viajes clandestinos
mientras una generación soporta esta tarde de dolor.

Maestro de la memoria
sobreviviente en este barco descostillado,
curador eterno de la historia,
testigo de clandestinajes inéditos,
dibujante de acuarela ensangrentada
pintor de lienzos color sepia
mentor de la historia olvidada
escultor de corazón en retirada.

En tus páginas queda el sombrero de Sandino
los caminos de Farabundo
y el confín de tus palabras no dichas
petrificadas en el aguacero de aquel abril y mayo.

Conozco tu anonimato a campo traviesa por el mundo
en busca del rastro de Farabundo
Conozco tu anonimato en las callejuelas de la Zacamil
en el eterno retorno del año dos mil
Conozco tu anonimato en el campus universitario
en la fecha del olvidado aniversario.

Estoy seguro del incendio escarlata en tu pecho
contemplo el horizonte enrojecido de las tardes
escucho el rumor de tu enojo
frente a las brújulas esquizofrénicas de los tránsfugas.




Dardo envenenado


Y entonces recorrí las mismas calles
todo era ajeno
nada me pertenecía.
Regresé a las horas perdidas de caminos muertos.

Estoy cansado de tanto desasosiego...
No tiene sentido continuar sin rumbo.
No puedo respirar si un mal presente pinchó la suerte
No puedo respirar si el aire está a la venta.

Ya basta de tanto estercolero golpeándome el tímpano.
Ya basta de tanto sordo eterno en el pavimento.

¿Es que acaso la memoria
es esta sangre que se dibuja en los libros?

Diez años después...







José Luis Escamilla




Nació en Apopa, San Salvador, la madrugada de un 28 de junio de 1970. Hijo de Carlota Rivera Valle y Francisco Escamilla Díaz.

Escamilla es profesor de Literatura hispanoamericana, centroamericana y salvadoreña en la Universidad de El Salvador. Se doctoró en Literatura de la Universidad Nacional de Costa Rica el año 2010.

Sus libros publicados son: Intersticios en Roque Dalton (2005) y El protagonista en la novela de posguerra centroamericana (2012); Esquinoccio (Editorial EquiZZero, 2012).