domingo, 8 de diciembre de 2013

Alfil Editores, una forma diferente de hacer libros.

Alfil Editores es un sello de Editorial EquiZZero encargado de la publicación de libros a bajo costo. Cada libro que se publica financia el proyecto EquiZZero. Consulta nuestros precios en: https://www.facebook.com/Equizzero



miércoles, 23 de octubre de 2013

Resultado del Tercer Certamen de Poesía Ipso Facto 2013

El jurado conformado por: Mario Noel Rodríguez, Elena Salamanca y Vladimir Amaya, habiendo revisado cada una de las plicas finalistas declara DESIERTO el Primer Lugar de Tercer Certamen de Poesía Ipso Facto 2013, por la razón siguiente:

“No hay creación de universo poético propio en ninguno de los textos. Esta falencia consigue que ninguno de los trabajos presentados pueda derivar en un libro, en una unidad articulada”

 Sin embargo, el jurado decide otorgar dos menciones honoríficas a las obras: HIERRO  Y ABRIL, cuyo seudónimo fue Kastroviev, que al abrir la plica resultó ser el salvadoreño Alberto Quiñónez y a TEMPESTADNAYADE, cuyo seudónimo fue Dante Milán que al abrir la plica resultó ser el salvadoreño Ernesto Bautista.


Ambas obras serán publicadas por Editorial Equizzero en un lapso no mayor de 10 meses a partir de la publicación de éstos resultados.

sábado, 14 de septiembre de 2013

Finalistas del Tercer Certamen de Poesía “Ipso facto” 2013


Publicamos la lista de las obras y seudónimos de los seleccionados para la etapa final del Tercer Certamen  de  Poesía  “Ipso faccto  2013". Sobre ellos  el jurado elegirá  un ganador. Aunque en  las bases se hacía mención de 10 finalistas la calidad de las obras nos hizo modificar la lista a 13 personas.


domingo, 19 de mayo de 2013

Landsmoder - artículo de Lauri García Dueñas para el "Periódico de poesía".





Artículo de Lauri García Dueñas sobre "Landsmoder", publicado en el "Periódico de poesía" de México, Nª 58 en abril de 2013.



Elena Salamanca (El Salvador, 1982) es de las voces poéticas más perturbadoras de la contemporaneidad centroamericana. 


Luego de sus sugerentes Peces en la boca donde el Facebook y una reescrita Sor Juana, aguijonean dulcemente la yugular del lector, crece en mancha, hacia lo oscuro y lo terrible, como helecho acuático y nocturno en Landsmoder (Editorial Equizzero, 2012), publicación consecuencia de haber obtenido el primer lugar en el 1er Concurso Ipso Facto de dicha editorial.

La primera parte del libro Colegio de señoritas españolas venidas a menos habla-canta-denota lo no dicho por toda una clase social desvencijada, educada (adiestrada emocionalmente) en colegios religiosos donde el patetismo crece en capilla ardiente. 

La ausencia del padre, dibujada en transparencia por una voz niña víctima que no pretende victimizarse, se reproduce en la conversación con una tiesa maestra de primaria, dando origen, a mi juicio, al poema más contundente del libro y a uno cuya completud brilla (como un vidrio roto en tierra negra) entre otros muchos poemas rebuscados de su generación y ubicación geográfica.


¿Entonces no voy a volver a ver a mi papá?
La señorita no supo qué responder

En la segunda parte: Galería de los héroes, pincha, la desgarradura se abre en el poemaLas niñas se levantan la falda y paren:

Las niñas se levantan la falda y paren. 
Paren. 
Paren niños delgados como ellas.
Apenas aprenden a caminar, los niños se caen.
Apenas hincan el diente en el pan, los dientes se caen.
El pan es muy duro, 
los dientes son débiles, 
los dientes son de leche, como dicen las abuelas.

Y luego, como si el poema metiera el dedo en la cerilla del trauma social:

Los niños van creciendo.
No son débiles como las madres.
Siguen encontrando en el camino a las vacas y los caballos, 
encuentran los vehículos, rompen los cristales;
encuentran las casonas, rompen las rejas.


Y los niños, 
con sus dientes astillados, 
con sus dientes malcrecidos, 
con sus dientes podridos, 
van mordiendo lo que encuentran en el camino.



Y muerden, 
sobre todo, 
la mano que los alimenta.



Los niños muerden
incluso
la yugular de esa niña 
que es su madre.

Más adelante, en el poema Muchacho, amor perteneciente a El cuerpo de la nación la maldición de la patria terrible, exagerada e histérica, es llevada a sus últimas consecuencias, abre fauces:

Camina, 
muchacho, 
yo soy tu amor, 
arrástrate con las manos y las rodillas, 
sángrate las manos, 
sángrate las rodillas, 
mancha la tierra.


Yo soy tu patria, 
muchacho, 
y te condeno a este único amor.

La patria es en los dedos de esta escritora, todo menos lo cursilo restringido de los fetiches folclóricos que en El Salvador aún no se han derrumbado.


Pero la patria, esa cosa indefinible, con la que nos tortura la voz poética, no es sólo la salvadoreña, es cualquier patria que aun teniendo ese nombre mayestático no es país ni mucho menos. 



En algunos momentos el lector podrá preguntarse ¿Es tan grande el martirio? ¿No es exagerado lo horrible?



Y sí, lo horrible se repite, crece:


Qué criatura horrible debí ser. 
Nunca tuve un espejo para constatarme, 
pero sentí la maldad de las dentelladas de mis hijos
                                          /en mis múltiples pezones.

Madre horrible. Hijos que devoran a la madre. Rotos quedan los arquetipos. 


El libro de Elena Salamanca me recordó El asco de Horacio Castellanos Moya. Libros donde el ojo de lo simbólico se abre para poner el dedo sobre la llaga nacional y recordarnos nuestro patetismo autoinfringido. 



Cierto halo de tragedia grandilocuente también me trajo a la mente a César Vallejo. 



Pero Elena es muy Elena. Ella, la autonombrada “Reina de la Independencia”, escritora, historiadora, artista visual, performer,  promotora cultural que organiza una feria de arte llamada FEA, brilla (como vidrio roto en tierra negra) con sus dos libros de poemas y los que vienen. 



Anómala, escritura de lo anormal (de ese tipo particular de anormalidad que pare belleza), atípica escritora centroamericana. Hay que leerla, como un mantra.


martes, 26 de marzo de 2013

Lirios en los viejos poemas, Mario Noel Rodríguez, Editorial EquiZZero, 2013.






Cuando un hombre decide recordar a una mujer, la imagen se vuelve espejismo, cuando un hombre decide cantarle a una mujer, la palabra se vuelve poesía; es decir, eterna. Así Mario Noel Rodríguez nos regala sus Lirios en los viejos poemas, una serie de 56 cantos escritos desde lo más profundo del alma, cantos que dejan su huella imborrable en el papel que los encierra y al mismo tiempo los libera, cantos con los que uno se siente identificado más allá de toda circunstancia. Si hay algo que defina la poesía de Mario, eso es la sencillez con que la palabra toma vida y, como pieza de rompecabezas, ocupa el lugar exacto, preciso:


Yo ya te soñaba desde antes de soñar en serio...



Omar A. Chávez



Selección poética




Chayo Mejía saca la mano para ver si llueve


Gracias por la sencillez y los ojos,
por la mirada que cambió el cauce de la vida.
Beso tu rostro helado en la distancia,
pero tus ojos, faros lunáticos que no cesan.

Gracias por tu mano en mi pecho desarmado,
por el plato rebalsado de pétalos y cuentos.
Yo saqué de vos la manera miope de entender las cosas,
abuela amada, por encima de mares y rabietas.





Rubidia, la ciega

En silencio te explico el color de las cosas idas,
cosas que si vuelven, volverán descoloridas.
Te cuento de la hamaca en el cielo,
para que despacio pronuncies sus siete tendones.
Así es la luna de los amantes,
las amorosas mejillas rosadas,
el verde genésico de los aguacates.
Rubidia, hermana de la alegría,
con un estilete partiré la noche para traerte la luz.



Amada Libertad, mártir

Ametrallaba el odio con la máquina de escribir canarios,
ella, la poeta de ojos abiertos para no perder el horizonte,
ella, que anduvo su corazón envuelto en un paño azul.

Ahora su voz ronda como buscando algo,
quizás el verso sobre la fatiga de conquistar la primavera,
quizás el pálido beso que jamás llegó al frente de guerra.





María Félix duerme con fondo de violines

Nada más una bocanada del puro, chiquita,
nada más un chupete para ver desplomarse la tarde.

Yo ya te soñaba desde antes de soñar en serio,
nada más levantabas una ceja y yo moría, moría.
Mirabas hechizando a los actores,
pero era a mí a quien mirabas.
Que otros hablen de la Monroe y la gula de galanes,
que ansíen el último trago derramado de la Hayworth;
que unos entre vino y vino aclamen a la Bardot,
que otros a la Bisset mojen de versos íntimos.
Yo nada más suplico una bocanada,
tu aliento de diosa embriagado, chiquita. 



Benazir, Benazir

Hay dolores que regresan con baba y pelos,
alzan su espada y vociferan lenguas turbias, regresan.
Aparecen cuando sopla un viento dañado del norte,
cuando una puerta esparce historias del desamor,
cuando el cáncer llega a desordenar la casa,
cuando la tinta nada más sirve para el olvido.

Del dolor que quiero hablar, jamás se marchó.




Febe, compañera mártir

Cantaré hondo agarrada de las piedras.
Cantos viejos sobre la piel borrada de repente,
gemidos que suban hasta romper el cielo,
la historia de los míos, tiernamente míos.

Aquí el amor se desgranó en suave aliento
y en el pecho la primavera agitó sus banderas.
Aquí los besos se repartían a ojos cerrados,
el forastero volvía por los suyos, por los suyos.

La risa de ayer hoy es polvo,
el abrazo de ayer es viento,
la luna de ayer es nube,
la sombra de árbol es calcinante abandono.

Hoy se agolpan las lágrimas contra el humo de las casas
y nadie trae la ternura para sanar la herida,
para desviar la noche que trajo desconsuelo,
la espada sobre el corazón de los inocentes.

Pero juro no ceder un espacio al desaliento,
juro nacer con los míos entre las ruinas,
juntar los corazones para pintarlos de alba.
Juro cantar agarrada de las piedras.




Lucía, la gitana perdida en Medellín

Leer una mano es leer una sombra.
Entrar a una sombra es entrar a un abismo.
Enfrentar un abismo es enfrentar un espejo.
Palpar un espejo es palpar tu mano.





Mario Noel Rodríguez



Poeta, escritor, periodista cultural, publicista, gestor cultural salvadoreño. Nace a la vida literaria conformando el grupo literario “El papo, cosa poética”.

Ha incursionado en el performance poético. En 2008 montó un homenaje multimedia a Frida Kahlo con la artista visual Alexia Miranda. Encargado de Cine Club, en Palacio Tecleño de la Cultura y las Artes. Presidente del Foro de Escritores de El Salvador. Fundador de grupo literario “Tareya”, de la Casa de Juan Caminos, así como de la Cofradía de San Simón. Editó el CD: “Jorge Galán, en otras voces”.

Publicaciones: Breve breve que la vida es breve, Ruiseñoras del Edén, Agítese antes de leer, La costilla, Por aquí pasaba un río, Hambre de vivir, Epitalamio, Este andar sobre las aguas, Foto movida, Sonectud, Epitalamio, Estado Vallejo, Irakundia, Rumor del rocío, Brasil poemas para cantar un país y un CD conteniendo su libro “Yo quiero ser frijol mágico” (leído por niños).